«¡Misión… en marcha!»

Nuestro lema pastoral del curso 2018-19, titulado “Misión… en Marcha” nace con la intención de sentirnos misioneros de la vida en los ambientes que tenemos cerca y también de los que tenemos lejos. Por lo cual, no es sólo una cuestión de distancias, sino más bien se trata de una postura ante el mundo. No es secreto para nosotros que muchos de nuestros chicos están lejos de encontrar un sentido auténtico a sus vidas, aunque los tengamos preparándose en nuestras aulas; muchos se encuentran solos, aunque en apariencia estén rodeados de gente. Muchos de nuestros niños y jóvenes viven procesos de separación y de rupturas, de conflictos en casa y de tratos poco deseables. Sus conductas, a veces disruptivas, no son más que gritos de auxilio que debemos atender con decisión y con compasión.

La misión que tenemos entre manos nos debe impulsar a transformar el mundo, y el inmediato alcance a este mundo está en las familias que atendemos, y está en la calidez humana que estamos llamados a cultivar en nuestro colegio, que no es sólo lugar de trabajo, sino que es -o debe ser, ante todo- una casa de puertas abiertas.

Nuestra misión educativa es la misión de Jesús, que nos invita a Amar hasta el extremo, a ir al último, al que más herido está, al más difícil… Jesús nos reta a dejar lo nuestro, lo cómodo, lo aparente, lo superficial, para alcanzar a los demás, para hablar desde el corazón, para tocar las fibras de lo humano, para aportar un rayo de esperanza a nuestros chicos y encender sus corazones.

El símbolo del cubo de rubik es un elemento que, con niños y jóvenes, nos puede ayudar en este gran objetivo de encontrar dónde y cómo podemos desarrollar nuestra misión, nos puede dar luces para entender que nuestro colegio es un espacio en el que todos tenemos un lugar, un sitio, un color.

Para quienes sabéis de eso, armar un cubo de rubik requiere de mucho esfuerzo, y supone pararse a reflexionar, preguntarse, informarse, confrontarse, intentarlo una y otra vez; a veces confundirse, tener paciencia y mucho tesón.

Os animamos pues a girar y girar, a darle vueltas a la vida para poder realizar la misión a la que Dios nos llama.

Misión-en-marcha-lema-pastoral3